Escuché canciones que comparaban un claro amanecer con la sonrisa de sus labios, que simulaban el canto de los pájaros con su bostezo al despertar. Que pintarrajeaban auroras cada vez que ella despertaba. Pero nada es como vos. Nadie es como vos.

También vi películas donde en un beso una cámara mostraba fuegos artificiales, retratando su grandeza. Donde la Luna la bajaban para acercarla hacia ella. Donde un avión dibujaba con humo su nombre en trazos. Pero nada se parece a vos. Nadie se parece.

Y en contratapas de revistas, en libros de poesías, en novelas televisadas, en cartas nunca escritas... enamorarse se volvía una serie de pasos marcados que llegaban siempre a buen puerto. Pero nadie llega a vos. Nadie.

Porque aún en este nuevo siglo no han logrado inventar algo comparable, encontrar en la Naturaleza algo que se asemeje a tus caricias, ninguna cascada que desemboque en tu cintura, ninguna estrella que encandile tu propia luz. Y yo, como dice Ismael, consciente del privilegio... te desnudo sin que nadie lo note. Sin que la noche te haga sombra.

Intento escribir alguna manera de nombrarte, de compararte, de soñarte. Y me doy cuenta que no hay palabras, que nadie las encontró, que ni siquiera puedo tomarlas prestadas. Miro a mi alrededor y aunque el viento sople suave en este atardecer, no se compara con la paz que me da que me tomes de la mano y la aprietes fuerte. Amanezco con las persianas abiertas y el Sol no es tan cálido como tu beso en la frente. Desaparezco del mundo y nunca estoy tan ausente como cuando me faltan tus buenos días.

Y es así, y no trato de entenderlo. Es parte de un Universo paralelo que nadie comprende porque no conocen, porque no se percatan, porque no prestan atención. Mientras el mundo se hace humo si te encuentro en alguna calle, y la única forma de regresar al mismo es cuando no estás vos. Ahí recién tomo consciencia del resto, de lo que no necesito.

Y nuevamente la radio pasando aquella hermosa balada que no te sabe nombrar, que no tiene prosa con qué compararte, que no encuentra palabra que describa tus detalles. Y otra vez la película de amor que siempre me hace llorar y sin embargo no logra alcanzarte, trazar un puente invisible entre vos y tu recuerdo. Y una vez más los libros intentando contar tu historia, pequeña cuando te veo, imposible de sentir en la piel si no es en tus besos.

Quedate, quedate aunque no den las doce. Quedate aunque París deje de existir. Quedate aunque tu risa no esté prendida de un alfiler. Quedate siempre conmigo. Para tener la canción que aún está por hacerse, la poesía que no tiene fin, la película que no tiene un nudo, solo desenlaces. Quedate que sin vos las palabras sobran y el frío acecha. Quedate conmigo. Por todo el tiempo que hemos perdido.

10 comentarios:

bche dijo...

se acabaría el desamor del universo con una carta de amor así en algún buzón del mundo :)
es precioso ^^

gracias por haber compartido conmigo tu genial punto de vista :)

un beso! :)

Natalia Maggi dijo...

"Nadie es como vos"... y si, de repente es tan hermoso descubrir ese secreto, saber que no existe un solo ser sobre la tierra que sea comparable siquiera en aspectos generales. Es hermoso y a la vez asusta, asusta porque si la perdés no hay otra, no hay segundas oportunidades, no existe otra persona capaz de ser lo que esa otra era.

Me ha pasado eso de no encontrar palabra que describa sus detalles... solía pasarme todos los días. Creo que aunque uno siente que se enamora de 'todo el paquete', generalmente uno termina amando los detalles, esas cositas que hacen a una persona única en el mundo.

No se si estas jodido Ale, o mejor que todos nosotros, no se! (:
Un cariño, ALEJO! jajaja

jiim dijo...

Wow, que hermosa manera de describir la necesidad tan imperante de ese alguien especial en nuestras vidas. Me encantó Ale, realmente. Voy a volver a leerlo, porque es dolor y placer a la vez, es sentir la pérdida desesperada y el encuentro pactado.
Fantástico, de verdad...
Saludos!


(PD: parece que ambos vamos a ver a Ismael este fin de semana.. o no? :))

jiim dijo...

Ah! Además de todos los comentarios que vas a leer mios... Podrías decirme de quién es la música que le ponés a los textos? Me fascina...

Saludos!

jiim dijo...

Pucha, te das cuenta? A mi tambi´ne me costó encontrar con quién ir.. Nos hubieramos escrito antes al respecto, nos encontrábamos allá y compartíamos el placer de dejarnos emocionar por Ismael.. jajaja
La próxima será, sin falta :)
Después te cuento qué tal.

Saludillos!

Ale dijo...

Bueno Jiim, lo de las canciones te lo contesto en los respectivos textos, no sé dónde contestarte tus mensajes ya :P

La canción de este escrito se llama "Through the arbor" y es de Kevin Kern, un pianista que me encanta.

jiim dijo...

Gracias por tomarte el trabajo! Ya mismo estoy haciendo la lista.. :) ajjaja
Besooss!

jiim dijo...

Esta entrada va a terminar siendo la más comentada por mi! jajaja Totalmente monopolizada va a quedar...

Si señor, me llegan al mail los comentarios, así que me enteré del que acabas de dejar en "amores de colectivo". Copincido con vos en lo de la melodía.. Y también me ENAMORO! Tengo también varios textos sobre esos amores de colectivo.. Me alegra no ser la única..
Ojalá la vida estuviera "soundtrakeada" como las peliculas.. jajajaja

viktoria dijo...

Qué lindo, lindo, lindo texto =)

Salud

Val dijo...

Cuánto extrañé tus palabras!